Para que se entienda cómo se privatiza la Sanidad pública en la Comunidad de Madrid, recuperamos hoy una grabación que realizó nuestro reportero Mico Letilla, escondido en el chiscón del escenario en el que Esperanzita y Güemes fashion daban una rueda de prensa explicando las enormes ventajas y beneficios de ese modelo sa
nitario que pretenden implantar en la capital del reino.ESPERANZITA: madrileños; hermanos todos en el amor de Rouco Varela; sus debo una explicación y la explicación que sus debo sus la voy a dar. Y por eso, hoy que llevo tacón alto y calentadores en las piennnas, voy a hacer unas declaraciones de alcance pa que sus enteréis de una vez de cómo vamos a mejorar la sanidad pública que las hordas sociatas han dejado hecha una penita pena. Nesecitamos más hospitales p’atender a las personas humanas y reducir las listas de espera que te esperarás. Porque estos socialistas han dejao la sanidad muy malamente y yo la voy a reponer. Asín que vamos a construir esos hospitales d’inmediato en unos terrenitos públicos que tenemos preparaos pa l’ocasión. (aplausos).
ASESOR 1: (levantando el dedo tímidamente) Jefa, le recuerdo que no tenemos dinero p’hacerlos.
ESPERANZITA: (colleja en el cebollamen del asesor) ¡que te calles, Carmele!; ya sé que andamos escasos de dineramen; y eso es así porque este Zapatero nos adeuda tropecientos mil millones de euros para que los coches oficiales pasen la revisión de la ITV ¡que nos tiene indiscriminaos!. (aplausos) Pero hits no problem, porque, como no nos llega el dinero, los hospitales los van a construir unas empresas constructoras, amigas nuestras, que pa eso son constructoras y saben construir; (aplausos redoblaos).
ESPONTÁNEO: Presi Espe, pero si los construyen las empresas privadas ¿esos hospitales serán publicos?.
ESPERANZITA: (al oído de un asesor) Ya están aquí las mojjcas cojjj…. de los sindicatos; ¿No le dije a Fabra que controlara la entrada de esa chusma de liberados, vagos y maleantes?. (Sonriendo al espontáneo) En asoluto, señor mío; está usté… pero que muy equivocao. Porque el suelo es público y los edificios también van a ser públicos cuando los terminemos de pagar a estas humildes y dadivosas empresas constructoras que nos ayudan, porque su tendencia natural es ayudar al prójimo. Asín es.
ESPONTÁNEO: Espe; ¿Y cómo se los vamos a pagar con el dinero público?
ESPERANZITA: (tamborileo con los dedos, ceño fruncido y mirada lacerante hacia el espontáneo). Pues ya le digo, y le enrepito, (pausa valorativa) que no se va a resentir el erario público porque se lo vamos a pagar en unos contratos hipotecarios de cómodos plazos a 30 años vista. Y además le vamos a conceder también la gestión de los servicios sanitarios. (aplausos a rabiar, sobre todo de Díaz Ferrán y su séquito).
ESPONTÁNEO: Espe, y entonces, si los edificios no estárán pagados hasta dentro de 30 años y la gestión de servicios, recursos humanos y materiales se otorga a empresas privadas, ¿Qué parte de la sanidad es pública?.
ESPERANZITA: A ver, a ver, señor mío; (en voz baja comenta con Güemes es fashion: éste no se entera). (A continuación se dirige de nuevo al espontáneo con solemnidad) La sanidad pública seguirá siendo pública, porque es públicamente conocido y publicado que la sanidad pública, es pública. Y, además, a los ciudadanos no les importa si la gestión es pública o privada, sino que lo que le importa es que si le duelen las muelas le quiten el dolor (lenguaje interno para sus adentros más adentros: ¡y a ti te voy a quitar las muelas como sigas asín, arruinándome esta inauguración, ¡so mamón!).
AMIGA DEL ESPONTÁNEO: Y digo yo, Presi; ¿no hay riesgo de que la sanidad se convierta en una oportunidad negocio para esas empresas gestoras en vez de primar la sanidad como un servicio básico y público?.
GÜEMES ES FASHION: (susurrando “La que faltaba pal duro” y mesándose el tupé que se mantiene sin fijador). Señorita, estamos en condición de poder afirmar que el cliente quedará completamente satisfecho. Y si no le devolvemos el dinero.
AMIGO DE LA AMIGA DEL ESPONTÁNEO: Pssejero Juanjo, querrá ud. decir paciente, en vez de cliente.
GÜEMES ES FASHION: (con gesto de fastid
io y mirando a la Jefa: me parece que hoy ha venido toa la familia de estos insurrectos rojos de mie….-acceso de tos. Cuando se recupera se dirige al interlocutor: qué más da paciente que cliente;¡pues no es de botánica el suceso!.
TÍA DEL ESPONTÁNEO: ¿y no le parece que cuando terminemos de pagar los hospitales, ya estarán muy viejos?.
ESPERANZITA: (pasándole una nota manuscrita a Güemes “Juanjo, vamos a terminar, porque esto es un nido de víboras rojas; hay que inaugurar algo d’inmediato. Lo que sea”. A continuación, rebusca en su bolso, saca un objeto y se dirige al auditorio engolando la voz) Queda inaugurada esta cacicada, digo… esta caceta; ¿en qué estaría yo pensando?.
Y así fue como se comenzó a configurar el modelo madrileño de Esperanzita sobre de la sanidad pública teniendo como lema “el dinero sigue al cliente”.
Busque, compare y pregunte a los profesionales de los centros sanitarios; a ver qué le dicen. ¿Tarán toos quivocaos?.
NOTA PARA DAR LA NOTA:
Nuestra solidaridad con los compañeros del Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica de Carabanchel (Madrid), dependiente de la Pssejería d’Ducación (como todos/as los profesionales de la Orientación Educativa Pública d’aquesta Comunidad de Madrid); a la vuelta de las navidades, se han querido incorporar a su puesto de trabajo y su sede no existe para ellos/as; al no darle ninguna solución alternativa prevista han tenido que vagabundear por los colegios de su sector; parece que por fin ya han encontrado alojamiento laboral repartiéndose por miniequipos en alguna tienda de ultramarinos del barrio, otros en la cafetería donde suelen tomar un café y el resto, previa presentación del pasaporte sin visado de turista (para no tener problemas con el padrón) parece que están alojados en un pasillo de la comisaría que quedaba cerca de su sede antigua; para preservar la confidencialidad de los datos y de los expedientes del alumnado, han colocado los archivadores anclados con unas cadenas y rodeando el portentoso árbol que hay al lado del palacete de la zona que está restaurando Patrimonio Nacional.
Cuando se le preguntó a los mandamases de la Pssejjería D’ducación, nos despacharon con unas declaraciones originales que muestran claramente su sensiblidad y reconocimiento hacia el trabajo que desarrollan los profesonales de la orientación: “es triste pedir, pero más triste es robar. Creíamos que el edificio estaba vacío y parece ser que no, que allí había algunas personas, al parecer humanas, que lo utilizaban como centro de trabajo. Asín son las cosas y asín sus las hemos contao”.
ESPERANZITA: (colleja en el cebollamen del asesor) ¡que te calles, Carmele!; ya sé que andamos escasos de dineramen; y eso es así porque este Zapatero nos adeuda tropecientos mil millones de euros para que los coches oficiales pasen la revisión de la ITV ¡que nos tiene indiscriminaos!. (aplausos) Pero hits no problem, porque, como no nos llega el dinero, los hospitales los van a construir unas empresas constructoras, amigas nuestras, que pa eso son constructoras y saben construir; (aplausos redoblaos).
ESPONTÁNEO: Presi Espe, pero si los construyen las empresas privadas ¿esos hospitales serán publicos?.
ESPERANZITA: (al oído de un asesor) Ya están aquí las mojjcas cojjj…. de los sindicatos; ¿No le dije a Fabra que controlara la entrada de esa chusma de liberados, vagos y maleantes?. (Sonriendo al espontáneo) En asoluto, señor mío; está usté… pero que muy equivocao. Porque el suelo es público y los edificios también van a ser públicos cuando los terminemos de pagar a estas humildes y dadivosas empresas constructoras que nos ayudan, porque su tendencia natural es ayudar al prójimo. Asín es.
ESPONTÁNEO: Espe; ¿Y cómo se los vamos a pagar con el dinero público?
ESPERANZITA: (tamborileo con los dedos, ceño fruncido y mirada lacerante hacia el espontáneo). Pues ya le digo, y le enrepito, (pausa valorativa) que no se va a resentir el erario público porque se lo vamos a pagar en unos contratos hipotecarios de cómodos plazos a 30 años vista. Y además le vamos a conceder también la gestión de los servicios sanitarios. (aplausos a rabiar, sobre todo de Díaz Ferrán y su séquito).
ESPONTÁNEO: Espe, y entonces, si los edificios no estárán pagados hasta dentro de 30 años y la gestión de servicios, recursos humanos y materiales se otorga a empresas privadas, ¿Qué parte de la sanidad es pública?.
ESPERANZITA: A ver, a ver, señor mío; (en voz baja comenta con Güemes es fashion: éste no se entera). (A continuación se dirige de nuevo al espontáneo con solemnidad) La sanidad pública seguirá siendo pública, porque es públicamente conocido y publicado que la sanidad pública, es pública. Y, además, a los ciudadanos no les importa si la gestión es pública o privada, sino que lo que le importa es que si le duelen las muelas le quiten el dolor (lenguaje interno para sus adentros más adentros: ¡y a ti te voy a quitar las muelas como sigas asín, arruinándome esta inauguración, ¡so mamón!).
AMIGA DEL ESPONTÁNEO: Y digo yo, Presi; ¿no hay riesgo de que la sanidad se convierta en una oportunidad negocio para esas empresas gestoras en vez de primar la sanidad como un servicio básico y público?.
GÜEMES ES FASHION: (susurrando “La que faltaba pal duro” y mesándose el tupé que se mantiene sin fijador). Señorita, estamos en condición de poder afirmar que el cliente quedará completamente satisfecho. Y si no le devolvemos el dinero.
AMIGO DE LA AMIGA DEL ESPONTÁNEO: Pssejero Juanjo, querrá ud. decir paciente, en vez de cliente.
GÜEMES ES FASHION: (con gesto de fastid
io y mirando a la Jefa: me parece que hoy ha venido toa la familia de estos insurrectos rojos de mie….-acceso de tos. Cuando se recupera se dirige al interlocutor: qué más da paciente que cliente;¡pues no es de botánica el suceso!.TÍA DEL ESPONTÁNEO: ¿y no le parece que cuando terminemos de pagar los hospitales, ya estarán muy viejos?.
ESPERANZITA: (pasándole una nota manuscrita a Güemes “Juanjo, vamos a terminar, porque esto es un nido de víboras rojas; hay que inaugurar algo d’inmediato. Lo que sea”. A continuación, rebusca en su bolso, saca un objeto y se dirige al auditorio engolando la voz) Queda inaugurada esta cacicada, digo… esta caceta; ¿en qué estaría yo pensando?.
Y así fue como se comenzó a configurar el modelo madrileño de Esperanzita sobre de la sanidad pública teniendo como lema “el dinero sigue al cliente”.
Busque, compare y pregunte a los profesionales de los centros sanitarios; a ver qué le dicen. ¿Tarán toos quivocaos?.
NOTA PARA DAR LA NOTA:
Nuestra solidaridad con los compañeros del Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica de Carabanchel (Madrid), dependiente de la Pssejería d’Ducación (como todos/as los profesionales de la Orientación Educativa Pública d’aquesta Comunidad de Madrid); a la vuelta de las navidades, se han querido incorporar a su puesto de trabajo y su sede no existe para ellos/as; al no darle ninguna solución alternativa prevista han tenido que vagabundear por los colegios de su sector; parece que por fin ya han encontrado alojamiento laboral repartiéndose por miniequipos en alguna tienda de ultramarinos del barrio, otros en la cafetería donde suelen tomar un café y el resto, previa presentación del pasaporte sin visado de turista (para no tener problemas con el padrón) parece que están alojados en un pasillo de la comisaría que quedaba cerca de su sede antigua; para preservar la confidencialidad de los datos y de los expedientes del alumnado, han colocado los archivadores anclados con unas cadenas y rodeando el portentoso árbol que hay al lado del palacete de la zona que está restaurando Patrimonio Nacional.
Cuando se le preguntó a los mandamases de la Pssejjería D’ducación, nos despacharon con unas declaraciones originales que muestran claramente su sensiblidad y reconocimiento hacia el trabajo que desarrollan los profesonales de la orientación: “es triste pedir, pero más triste es robar. Creíamos que el edificio estaba vacío y parece ser que no, que allí había algunas personas, al parecer humanas, que lo utilizaban como centro de trabajo. Asín son las cosas y asín sus las hemos contao”.
Subimos unas viñetitas con nuestro agradecimiento al blog de los calvitos.
