EL TEOREMA DE PITÁGORAS: REFORMULACIÓN EMOCIONAL

La Vicepesssejera de Educación de la Comunidad de Madrid, gran ideóloga y experta en teoremas matemáticos (la sin igual Alicia Delibes) lleva tiempo preocupada por los bajos resultados en matemáticas obtenidos por el alumnado de esta Comunidad. Esta desazón llevó a Aly Deli a concienzudas deliberaciones; y entre delibera que deliberarás y delirios que vienen y van (como las oliñas que veñen e van) se le iluminó de pronto la mente cual si hubiese tenido la misma revelación mística del famoso sueño de Descartes. Y no es para menos, porque, intentando desentrañar los principios matemáticos, investigó con lupa sobre el Teorema de Pitágoras arrugando el entrecejo y juntando dos neuronas de las gordas, gordas; tras el esfuerzo llegó sin dudarlo a una revolucionaria conclusión: proponer una reformulación emocional del mencionado teorema; nuestra pitagorina ha descubierto, ni más ni menos, que la hipotenusa -tan cándida y espigada ella- cohabita desde hace tiempo con uno de los catetos. La cosa no termina aquí, porque el otro cateto (que al parecer los tiene cuadrados), también está enamorado recóndita y perdidamente de la hipotenusa; y preso de un ataque de celos ha decidido romper la fórmula negándose en rotundo a sumar la parte del teorema que legítimamente le corresponde. De esta guisa la fórmula quedaría incompleta sine die.
Este hallazgo sorprendió a la Vicepessejjjera entregando premios, en Libertaz Digital y tal y tal, a todos los que habían adquirido su libro “La gran estafa” del Grupo Unison Ediciones con oferta-regalo del lote de las obras completas de Marcial Lafuente Estefanía. Lógicamente después de semejante ofertón el grupo editorial se vió obligado a cerrar, pero eso es otra historia.
Embargada por la emoción, la científica Aly Deli –consciente de que semejante hallazgo imprimirá sin duda un giro copernicano al Teorema de Pitágoras- corrió a comunicar la noticia a la presidenta de la Comunidad, EsperanZita Aguirre. La encontró cantando por soleares “me llaman la bien pagaaaá” y haciendo un breve inciso, sin descomponer la figura, la condesa consorte dijo :
-Yo no sé nada y si la hipotenusa decidió amancebarse, Dios me perdone, con uno de los catetos en detrimento del otro, sus razones tendrá, ¡qué se habrá creído ese cateto!. De sobras es sabido que los catetos son más cortos que la hipotenusa y no son de fiar; aunque también es cierto que, de momento, ninguno está imputado.
Acto seguido se retiró a sus aposentos con una ensaimada en la mano dispuesta a leerse de una sola sentada los 17.000 folios del caso CUTRE (en alemán Kurtel) tras el levantamiento de 1/3 del secreto de sumario/sudario. Los otros 2/3 de momento se los deja para que los vaya repasando Lopez Viejo.
La Vicepessssejjjjera Aly Deli quedó un poco ojoplática por la reacción de su Jefa, pero se recuperó de inmediato y, henchida de satisfacción, convocó una rueda de prensa; en ella declaró a este noticiario (desgraciadamente el único que acudió al evento), que la reformulación del Teorema de Pitágoras en su vertiente emocional la comenzó a barruntar mientras reposaba la cena con la serie televisiva de “Física y química”.
Su marido, Regino García-Badell Arias (sobrino carnal de Arias Navarro), aún no ha podido disfrutar personalmente del notición ya que se encuentra de safari por África y al parecer sigue de cerca la pista de un super-lacoste (que es como se llama a los cocodrilos en los círculos de cierta gente de alcurnia); pero ya le ha mandado un eseemeese via satélite, comunicándole que, asín que vuelva, organizará una superfiesta a la que irá ¡ijaté! hasta Ricardo LaCosta, cueste lo que cueste.
Ahora la Vicepesssjjjjjera está centrada en un análisis del enigma de Fermat y su repercusión sobre el vuelo de las aves migratorias que desde los países nórdicos recalan en el vertedero de Valdemingómez para pasar el invierno.

Para este importante proyecto, de innegable aplicación práctica a las aulas, cuenta por lo visto con la inefable ayuda del Diresstor Xeral de Mejoura de la Calidade educativa Don Xavier Gisbert ¡Qué Cruz!.
En la fotito puede apreciarse una instantánea con el momento en el que la Vicepppppssssjjjjera, arrobada por la emoción, revela al mundo científico las obtusas y complicadas relaciones de este triángulo amoroso entre la hipotenusa y los dos catetos.También puede apreciarse cuál es es cuadrado de los catetos que se encuentra ligeramente desplazado hacia un segundo plano.
Conclusión:

Si este relato parece friky, con la que está cayendo, no hay duda de que la realidad supera con creces a la ficción.